La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

lunes, 23 de septiembre de 2013

Aunque parezca mentira.

Y aunque parezca mentira hay políticos que dimiten. No, no es de aquí, sino brasileño. El ministro de Asuntos Exteriores de Brasil ha dejado su cargo después de que diplomáticos brasileños facilitaran a un senador boliviano su huída a Brasil. Este senador, acusado de corrupción y con varios juicios pendientes, se había asilado en la embajada carioca en Bolivia, y de allí se ha podido trasladar a Brasil gracias a los manejos de esos diplomáticos. Nada que ver con el caso de Snowden o Assange, y lamentablemente más parecido al caso del pederasta iraquí nacionalizado español.

El escándalo ha sido mayúsculo pues el fugado ni siquiera ha sido llevado al país vecino en avión, sino que ha sido mediante un coche oficial y escoltado por soldados brasileños. Vamos, todo disimulo. Al parecer el ministro brasileño no ha visto otra salida que la dimisión, pero nos cabe la duda acerca de si todo se debe al tamaño de la pifia y que la presidente no le haya dado otra opción, o que se trate de uno de los pocos políticos que aún conservan algo de dignidad. Tal vez se deba a algo de genética, ya que su apellido es “Patriota.”

Tal vez tenga algo que ver.

lunes, 16 de septiembre de 2013

El gancho.

Suelo pasar los veranos en una pueblo con una gran embalse. En dicho embalse, como en casi todos, está prohíbido el baño, pero idefectiblemente en estos días se puede ver numerosos bañistas haciendo caso omiso de los carteles que advierten del peligro que existe. E igualmente todos los veranos son varios los que tienen que ser rescatados por los bomberos tras ahogarse.

Lo que me ha llamado la atención tras el rescate ayer mismo de los cadáveres de dos bañistas ecuatorianas, es que el instrumento con el que finalmente son sacados los cuerpos del agua son llamados "bicheros", y aunque la RAE define al bichero como 1. m. Mar. Asta larga que en uno de los extremos tiene un hierro de punta y gancho, y que sirve en las embarcaciones menores para atracar y desatracar y para otros diversos usos.

Teniendo en cuenta que a menudo, como ha sido en este último caso, los familiares y conocidos de la víctima rodean ansiosos y angustiados a los bomberos mientras realizan su trabajo, puede resultar un tanto ofensivo para aquellos escuchar algo parecido a: "¡Pásame el bichero, que parece que ya lo he encontrado!" Al menos en inglés utilizan el término "Boat Hook", sin duda más preciso y técnico, pero para evitar más anglicismos de los necesarios se podría emplear un neutro "gancho". Quedaría más inocuo.

lunes, 9 de septiembre de 2013

A otra cosa.

Finalmente Madrid se ha quedado sin Olimpiada. No es que fuera yo muy devoto de ellas, pero aunque no siento una profunda tristeza, no dejo de sentir un ligero resquemor pensando en que el bloque galo nos la ha vuelto a jugar. Si la Olimpiada hubiera venido a Madrid, París hubiera visto imposibilitado el lograrlo para 2.024 por aquello de la rotación geográfica. -Ya se podría implantar algo parecido en referencia a la procedencia de los presidentes de esta nación-, mientras que si la cosa iba para Tokio o Estambul, el camino quedaba más despejado. Estambul como tonto útil, que tampoco queda muy alejado.

Espero, confío y anhelo, que Madrid no vuelva a dar coces en el aguijón y se dé un respiro. No parece que los Juegos Olímpicos se vayan a cancelar próximamemente, así que es mejor dar paso libre a los parisinos, recobrar el aliento y a otra cosa.

Y hay ejemplos históricos, en 1.936, mientras se celebraba la Olimpiada en el Berlín nazi, en Barcelona se tuvo a bien convocar una Olimpiada Antifascista que tuvo regular éxito de convocatoria y pésimo logro de records. Así que sugiero las instalaciones deportivas ya construidas para que en 2.020, o antes inclusive, convocar una Olimpiada antifascista, antibelicista, antidemócrata, antimachista, anti-antifascista, antipolución, ecologista, propereza, por el botellón, antideportiva y hasta rizando el rizo: culturales. Da igual, la que tenga más poder de convocatoria, el caso es que vengan tropeles de masa a dejarse las divisas y animar nuestra atribulada economía. El motivo es lo de menos, que ya veo a unos cuantos chinos ojeando las instalaciones para comprarlas por cuatro duros y montar algún negociete.