La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

lunes, 24 de junio de 2019

A por el Nobel.

Hace pocos días Estados Unidos anunció que había estado a punto de iniciar un ataque sobre Irán, y todo motivado por el derribo de un dron espía; y supongo que también acompañado por esos extrañas explosiones ocurridas a petroleros que navegaban por la zona. Conociendo el historial de U.S.A. fingiendo agresiones, habría que poner todo ello en cuarentena.

Tal vez todo se trata de un globo y haya resultado ser un farol de Trump, quien nunca habría tenido intención de llevar a cabo la represalia, y así, soltando la bravata, amenazar al régimen de los ayatolas, los cuáles ya han respondido que Trump no se ha atrevido con ellos, pero tal vez el miedo vaya por dentro. 150 muertos son muchos muertos, incluso en una dictadura teocrática.

Lo que sí me pregunto, es qué hubiera sucedido si el inquilino actual de la Casa Blanca hubiera sido demócrata y por tanto ídolo de las izquierdas mundiales. Seguramente a estas alturas ya se hubiera iniciado una campaña para otorgarle el Premio Nobel de la Paz, que por menos ha sido concedido en otras ocasiones.

lunes, 17 de junio de 2019

Lección de democracia.



Según se cuenta en el libro de Números el pueblo de Israel decide enviar doce exploradores para investigar la tierra prometida.

Dichos expedicionarios se encuentran grandes frutales, tierras feraces y agua abundante. El problema es que tanta profusión de alimento ha hecho que los habitantes del lugar hayan crecido más de lo habitual, por lo que a diez de los espías les parece una misión imposible conquistar esa tierra.

Vueltos al campamento, el pueblo de Israel se encuentra con que diez de los expedicionarios se muestran contrarios a la aventura bélica, tomando el papel de palomas, y dos, Josué  y Caleb, partidarios de intentarlo, lo que llamaríamos halcones.

La asamblea viendo los porcentajes 10-2, se muestra favorable a dejarlo para otra vez.  Ya se buscarán tierras en otro lugar.

Consecuencia, Jehová no se muestra tan respetuoso con la democracia,  y castiga al pueblo a vagar por el desierto nada menos que 40 años, premiando a los “halcones” con poder ver  y ser enterrados en la tierra prometida. Eso sí, también después de haber pasado los cuarenta años con el pueblo.

Y es que los números no lo son todo,  y hay que fijarse en las posturas que hay detrás de cada cifra.

domingo, 9 de junio de 2019

Nadal vs. las Galias.



Reconozco que nunca he sido muy aficionado a Asterix, me decepcionaba profundamente saber que pasara lo que pasara durante la historia, al final la viñeta que cerraba la trama era un banquete donde todo acababa bien para los bueno –a excepción del bardo de  la aldea-. Todo eran buenos dibujos, personajes más o menos conseguidos, pero nada de emoción acerca del resultado final.

Algo parecido me pasaba con Supermán, aunque los guionistas parece que han detectado el problema  y al parecer (ya no estoy tan al tanto de sus aventuras  desventuras) han llegado a matarle  y describir cómo se comportan los demás superhéroes con el hombre de acero fiambre.

Por todo ello me produce un especial placer cada vez que Rafa Nadal se lleva una Roland Garros, el piloto, en las Galias. Los aficionados franceses se sienten como yo, saben que el balear debe contar con alguna poción mágica que reduce los daños de su rodilla, y se acaba llevando el trofeo. Si esto sigue así, las gradas se van a despoblar de franceses que habrán de esperar pacientes a que  la biología haga su efecto,  y el manacorí lo tenga que dejar por aquello de los achaques de la vejez,  y mientas recen porque  no le dé por que tenga un descendiente que lo vengue una vez que deje la raqueta.

domingo, 2 de junio de 2019

China.

Anda un poco errado Trump si piensa que con medidas proteccionistas a la vieja usanza va a poder ganar el pulso comercial con China.

La réplica del gigante asiático puede ser brutal y barrer del mapa al país todavía líder.

Más bien, el presidente yankee debería fijarse que el éxito chino se debe a que sus trabajadores no tienen empacho en desempeñar largas jornadas laborales, sus sueldos son irrisorios y el absentismo laboral es mínimo.

Ya que U.S.A. ha sido siempre especialista en meterse donde no le llaman e inmiscuirse por todo el orbe, yo le sugeriría que una pequeña parte de su presupuesto para proyectos inconfesables se dedicara a fomentar y subvencionar el sindicalismo en China: los chinos después de algunas huelgas más o menos reprimidas comenzarían a trabajar menos por más, los enfermos a quedarse en casa y lentamente la producción industrial china comenzaría a decrecer.

Más barato y con menos peligros de réplicas indeseadas.

Eso, o montar otra guerra del opio.