La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

domingo, 24 de diciembre de 2023

La botella voladora.

Ayer fue el discurso de Navidad, y hoy, Navidad, las distintas fuerzas políticas harán las respectivas valoraciones de este. Valoraciones que, seguramente, ya estarán escritas hace días.

Pero me sorprendería mucho que en más de una no se mencione algo que tiene soliviantado al bloque progresista de este país y a sus incombustibles seguidores.

Y es que, en todo el discurso, Felipe VI no hizo la más mínima mención a la brutal agresión cometida para la fiera corrupia fascista encarnada en Ortega Smith.

Da igual que las imágenes dejen esa agresión en un simple gesto de rabia que recibe una inocente botella de plástico, el discurso adoptado es que, después de lo de Tejero, es la mayor violencia desatada en una asamblea democrática, y de ahí no hay quien los mueva. Después de todo, lo mismo la Inteligencia Artificial ha podido manipular las imágenes.

Y supongo, que de nada serviría saber qué frase escuchó Ortega para tener tal respuesta. Sería interesante saberlo.

sábado, 9 de diciembre de 2023

I.A.

Andan todo eufóricos por Europa porque han sacado adelante una ley para intentar legislar sobre algo tan peliagudo, cambiante y complejo como la Inteligencia Artificial, que, definitivamente, ha venido para quedarse.

Se supone que ahora tendrán que sacar adelante reglamentos que amplíen la normativa sobre la gran cantidad de aspectos sobre la que incide la dichosa I.A. Para ello tendrán que formar múltiples comisiones para desarrollar esos reglamentos.

Después esas normas se tendrán que volcar en cada país, lo cual ampliará el funcionariado encargado de ello. Y suponiendo que, sobre todo en España, cada región quiera adoptar la legislación que llega a las particularidades de sus ciudadanos. Que, si no las hay, pues se inventan.

Y ante tamaño gasto de tiempo, dinero y esfuerzo, ¿no sería más fácil encargar todo ese articulado a la propia I.A. Se supone que está para eso.