La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

lunes, 27 de octubre de 2014

El pastel.

Después del último caso de corrupción descubierto no me cabe duda: la historia se repite con insistencia machacona. Después de pensar que jamás se iba a volver a aquellos tiempos de Felipe González donde cada día nos desayunábamos con uno o más casos de corrupción, vemos que estamos volviendo a la misma situación.

Y con un agravante, antes sólo estaba metido en el ajo el partido gobernante, el cual se repartía a su antojo el pastel que cocinábamos entre todos los que pagábamos impuestos. Ahora se han sentado a la mesa sin el menor pudor los partidos a los que toca estar en la oposición y hasta los sindicatos.

Y el que paga los ingredientes del pastel ve que de esa forma el pastel tiene que ser mucho más grande, porque antes para que uno se sentara a la mesa, otro la tenía que dejar. Ahora simplemente se agrega otra silla más.

Corremos el peligro de que la situación se convierta en algo normal, inevitable gobierne quien gobierne y hasta llegar a la conclusión de que mejor que roben los míos, que me caen mejor.

En fútbol se habla mucho de que a veces un equipo no gana un partido, sino que lo pierde el rival por lo mal que lo ha hecho. De momento por la izquierda ha surgido el populismo barato, y no sé lo que tardará en surgir por Estribor, que difícil no lo tiene: inmigración descontrolada, paro, delincuencia, etc. Y entonces tendremos el reiterativo choque de trenes del que realmente serán culpables los que ahora se reparten el pastel.

domingo, 19 de octubre de 2014

Confusión.

Llevaba tiempo demorándolo, pero recientemente me di cuenta de que era necesario el pasarme por el oculista con la mayor brevedad posible.

Había entrado en una librería cercana a mi domicilio, pero la cual no suelo frecuentar porque viendo el material que ofrecen en su escaparate uno llega a pensar que está ante la biblioteca con que debían estar dotadas las chekas de Madrid en los años 30, y si decidí visitarla fue porque andaba desesperado a la búsqueda de un libro escolar que no había forma de encontrar ni vivo ni muerto.

Mientras esperaba observé tras el mostrador el típico corcho con cartelitos alusivos a actividades que hacen en ese local grupos, colectivos, partidos, ONG's, sindicatos, etc. de todo pelaje iba a decir, pero no, de un solo pelaje más bien aunque diferenciados por el matiz del color de ese pelaje.

Y de repente me fijo en un pequeño papelito donde se anuncian tertulias, pero cuyo contenido no adivino a vislumbrar. Como no me puedo acercar debido a mostrador, decido, ayudándome de las nuevas tecnologías que ya no son tan nuevas teniendo en cuenta el modelo de teléfono que uso, hacer una foto con disimulo del corcho, y ya veré en casa de qué se trata.

El motivo de mi atención es que el aviso anuncia una tertulias llamadas DMD y que inconscientemente mi despistado subconsciente asocia a Dios mediante, tal vez porque un amigo, de esos que son católicos a machamartillo, suele utilizar como abreviatura.

Ya en la calle miro la imagen y la calidad deja mucho que desear, aunque ya intuyo que no es de lo que pensaba.
Más intrigado aún busco por la red la página de la biblioteca, y me encuentro con lo siguiente:

         Así que DMD significa Derecho a Morir Dignamente, y que la tertulia la imparte nada menos que el Dr. Montes. Así que en ese momento veo que Dios no anda en el asunto y que definitivamente me tengo que ver la vista para evitar tan tremendas confusiones.                            

domingo, 12 de octubre de 2014

Tarjetas.

Y cada vez va saliendo más a la luz todo el entramado de las dichosas tarjetas opacas, donde están metidos hasta las corvas derechas, izquierdas, sindicatos, empresarios, etc. Todavía no se sabe de nadie que la recibiera y no la usara, y desde luego, que la rechazara. Y viendo los cargos indigna ver que en una gran proporción era para "vicio": clubes, joyerías, lencería, viajes, comilonas. Todavía está por ver que alguno se comprara un libro con la tarjetita.

Es de suponer que tras esto, en Bankia el uso y disfrute de estas tarjetas quedará suprimido, pero,¿qué hace suponer que en otras entidades bancarias no hayan existido y existan esas prácticas? Sobre todo pienso en Cajas que más bien parecen representación de la esencia de determinados territorios.

Y si pensamos en cómo los bancos financian las campañas electorales de los partidos, en cómo más tarde esos préstamos son graciosamente condonados y que cajas como Bankia tienen dentro de sus consejos a representantes de esos partidos morosos, nos encontramos con un círculo vicioso de muy difícil solución. Y mientras el depositario de sus ahorros haciendo cola pacientemente.

Y tampoco estaría de más investigar un poco más al Corte Inglés, gran beneficiario en esas compras.

domingo, 5 de octubre de 2014

Su propia medicina.

Aunque he intentado seguir todo lo que se va informando sobre ese mal engendro que es el Estado Islámico, he procurado no ver ni uno solo de los vídeos donde esos malnacidos decapitan a inocentes o masacran cristianos, yazaríes u otros musulmanes. Es algo que me ha parecido como seguirles el juego.

Pero hoy he procurado obtener algún vídeo o información gráfica sobre el último (cuando esto escribo, porque cuando se lea ya será como mínimo el antepenúltimo) atentado sucedido en la zona.

La salvedad es que en este caso el atentado ha sido sufrido por un campamento del Estado Islámico. Una militante kurda, dirigente según unas fuentes y simple guerrillera según otras, se ha metido en un campamento del E.I. y se ha dedicado a ir arrojando bombas a diestro y siniestro antes de activar su cinturón de explosivos. Imposible averiguar a cuántos se ha llevado por delante porque las víctimas en este caso no dicen nada del asunto por sus vías habituales.

Pero todo indica que a los del E.I. se les empiezan a torcer las cosas. EE.UU. y aliados les están arrojando una cantidad considerable de bombas a diario y ya los propios musulmanes de la zona no afines les están dando ya para el pelo. Seguramente lo más efectivo serán las bajas que causan los aviones estadounidenses, pero el golpe psicológico de este atentado no se puede desdeñar. Estamos ante una heroína con todas las de la ley.

Así que no se puede descartar una derrota próxima de los terroristas con ínfulas de ejército, eso sí, tan sólo pedir que está vez los aliados no vuelvan a dejar la muestra que se vuelve a reproducir, hay que acabar con todo rastro sin compasión.