Eurocopa.

 En 1969 se produjo la guerra del fútbol. Dicho conflicto enfrentó a El Salvador contra Honduras, y no es que las hostilidades se desataran por una desavenencias futbolísticas, sino que casualmente la guerra coincidió con un partido entre las dos selecciones.

Viendo el plantel de equipos que están disputando la Eurocopa se puede ver que es algo que podría perfectamente suceder hoy en día. No hay más que ver lo reciente que está el momento en que Eslovenia dejó de estar unida a Serbia dentro de Yugoslavia, también como Inglaterra estuvo dentro de la coalición que bombardeó Serbia, y, menos mal que no se ha dejado participar a Rusia, que podría haberse enfrentado a Ucrania.

Y mientras todo se resuelva sobre el cesped, todos contentos, porque no dejaría de tener su morbo un Inglaterra-Escocia o Alemania enfrentándose a Francia o Inglaterra, o Croacia o Albania contra Serbia.

Y para más interés, todo ello desarrollándose en territorio alemán, veterano en todo tipo de lides.

AMGD

 Durante siglos, la masonería ha tenido como enemigo declarado a los jesuitas. En ese tiempo han conseguido su expulsión y prohibición en diversos países.

Pero pese a ese empeño, la orden ha conseguido sobrevivir a lo largo de la historia. Sin embargo, lo que no ha conseguido el acérrimo enemigo de los hijos de San Ignacio de Loyola, parece que lo va a conseguir el mercado inmobiliario, y es que, en Mallorca, los jesuitas van abandonar histórico colegio Montesión en Palma y emigrar a la península. Todo ello para beneficio de un empresario que ha visto la ocasión de hacerse con tan interesante edificio.

Algo que recuerda al caso de las monjas burgalesas pero sin falsos obispos ni excomuniones. Vamos, el tipico caso de deshaucio de quien no tiene dinero para mantener su casa y el adinerado que por una limosna se hace con un chollo.

Y mientras la masonería internacional que tanto dinero maneja, viendo cómo se le escapa una ocasión de haber causado una humillación histórica al enemigo. 

Pero conociendo la historia, se verá como en algún momento los jesuitas volverán a Palma de Mallorca.

No es excusa.

 

Hay que reconocer que nuevamente Los Simpson lo dijeron. Después del historial patético del presidente retirándose de su trabajo durante cinco días para reflexionar, mandando cartas a la ciudanía para evitar dar explicaciones, acusando a sus rivales en enfangar la política cuando él y los suyos son maestros consumados en ello, más de uno se iba a ver legitimado a hacer lo mismo.   

Pues según Los Simpson, va a ser algo que no servirá de excusa.