Al parecer sólo estarán con toda seguridad libres de guardias, servicios, maniobras y otras actividades las militares que tengan hijos lactantes de hasta un año de edad. Y las que los tengan de un año a cuatro dependerá de cómo estén las necesidades del servicio.

Eso me recuerda una vez que leí las condiciones a una oposición a la Policía Municipal de Madrid. En ella se establecían diferentes tiempos máximos para realizar una carrera de cien metros a los opositores.
Pensé en que la misma norma que fijaba esos tiempos debía establecer la obligación futura de los delincuentes para que al huir de un policía perseguidor corriera un poco más despacio de lo que fuera posible. Claro que, asimismo debería fijar el compromiso de los policías locales masculinos para aflojar la velocidad cuando corriera tras una mujer. Un poco lioso para regularlo tal vez.
Pero que tengan claros las militares españolas que una vez que gane Podemos el poder no existirá impedimento alguno para que las madres soldados y oficiales lleven a sus hijos lactantes o no a las guardias, maniobras, servicios y hasta a las trincheras si el país se mete en alguna guerra (tal vez contra la OTAN)