Como era previsible, en los dichosos barcos de la flotilla no ha aparecido ayuda ninguna. Una de dos, o se la han ido comiendo con todo lo que han tardado en hacer la ruta, o en ningún momento ha habido alimentos en las bodegas.
También es menester señalar que tampoco han aparecido armas para los terroristas, como en ocasiones han sugerido las autoridades israelíes.
Puesto que los marinos improvisados van a ser deportados por vía aérea, queda por saber qué va a suceder con todos esos barcos. Tal vez podrían servir para ir buscando todos los teléfonos que fueron a parar al fondo del mar al ser abordados los barcos. Porque si una mísera pila ya contamina unos cuantos litros de agua, es de suponer que un teléfono, batería incluida, debe contaminar mucho más. Y no parece que Greta se haya opuesto en modo alguno al proceder de tan extraño compartimiento. Solo faltaría que apareciera una imagen de Greta desprendiéndose de su celular.
Es curioso, cuando llega una patera a las costas españolas, los inmigrantes se deshacen de su documentación pero conservan a toda costa sus teléfonos, en el caso de Gaza han hecho exactamente lo contrario.
Puede que la "ayuda humanitaria" haya ido caducando y la han tenido que tirar. La falta de ayuda y deshacerse de los móviles (que es ocultar todos los mensajes a lo bestia) son prueba suficiente de que el objetivo de la flotilla era provocar, lo que esperaban conseguir con esta provocación está en el fondo del mar con los móviles. Muy acertado lo que dices.
ResponderEliminarUn saludo.
Creo que todo el que tenga dos dedos de frente, sabe de sobra cuáles eran los objetivos de la flotilla.
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