La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

domingo, 13 de marzo de 2016

Cabras y lobos.

Después de ver este fin de semana los diferentes informativos y leyendo algún que otro periódico, no me cabe la menor duda que las Autoridades ¿competentes? vuelven a caer nuevamente en el defecto de no hacer exactamente lo mismo: ver algún telediario y leer algún periódico, aunque sea de esos gratuitos.

Debe ser por esa moda de tener asesores que recortan las noticias que piensan que a sus jefes le pueden interesar, y les preparan un dossier para tener al que les paga informado y al día. Sistema rápido y cómodo, pero que hace que muchas informaciones y cosas que suceden no lleguen al atareado responsable. Seguramente porque se busca que más que tenga conocimiento de lo que sucede, esté preparado para responder a cualquier venablo envenenado de la oposición (en cuyas filas suele suceder exactamente lo mismo)

Ha habido dos noticias que se han repetido con una frecuencia demoledora: una el exceso de cabras montesas en la Sierra de Guadarrama, lo cual ha llevado a determinar que hay que quitar de en medio a la mitad de los ejemplares. Unos cuantos atrapándoles y llevándolos a otros lugares, método bastante caro y laborioso, y otros simplemente siendo abatidos por cazadores, pero sin llevarse nada de la pieza.




Y en esos mismos noticieros se daba la noticia de que ha habido una manifestación ecologista protestando porque se están pensando limitar la presencia del lobo en muchos lugares de España por los daños que causan al ganado.

Si un funcionario con capacidad suficiente viera esas dos noticias se daría cuenta que mover un lobo de un lugar a otro debe ser más barato debido al tamaño, así que se podrían llevar unos cuantos ejemplares a la Sierra de Guadarrama para que dieran buena cuenta de unos cuantas cabras montesas, y todos contentos.

Bueno, todos menos las cabras que fueran devoradas, pero que al menos tendrían la oportunidad de huir de las fauces lobunas. Y tal vez algún excursionista que fuera atacado por los lobos, pero eso ya son daños colaterales.

3 comentarios:

  1. Estupenda perspicacia la tuya al comprobar la falta de sincronización de dos acciones a realizar que se hallan embutidas en el mismo Ministerio y en la misma Dirección General. Pero que, por lo que explicas, los responsables no se han enterado de que ambas van con conjuntadas.

    Quitar lobos donde sobran, para llevarlos a donde sobran las cabras. Y asunto resuelto.

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  2. Para hacer eso, habría que pensar. Dura tarea.

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  3. La cantidad de metáforas políticas que se podrían hacer con este tema!!

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