Interesante el modo en que está regulado el derecho a la huelga en Alemania.
Para empezar están prohibidas las huelgas políticas. Sólo se puede convocar una huelga por motivos laborales. Pero antes es preciso un paso bastane interesante. Se tiene que votar entre la plantilla afectada si se quiere hacer la huelga o no. En caso de un resultado negativo no hay nada que hacer. No se puede convocar esa huelga.
Si el resultado es positivo entonces ya se puede hacer la huelga. De esa manera los sindicalistas no se arriesgan al ridículo de convocar una huelga que nadie sigue, saben que la huelga va a ser seguida y quita incentivos a los siempre peligrosos piquetes "informativos".
Con los recortes que está requiriendo la crisis y con el previsible cambio de gobierno, los sindicatos se van a ver impulsados a hacer centenares de huelgas, y con un número reducido de delegados sindicales la norma no les vendría nada mal.
Ahí está la sugerencia.
Se van a ver obligados por todo lo que han cacareado en contra del presumible nuevo gobierno.
ResponderEliminarMás valdría arrimar el hombro y ayudar a los trabajadores con cosas más serias que una huelga por obligación.