Recuerdo cuando visité París. Me llamó la atención la enorme cantidad de ciudadanos ataviados con vestimentas árabes. Lo cual era más llamativa en ellas. Supuse que una movilización de toda esa población podría causar problemas en cualquier sociedad.
Hoy me desayuno con la noticia de que Francia ha decretado la expulsión de todos los imanes radicales que operan en su territorio. Parece ser que pese a tener un gobierno socialista, no le ha temblado la mano a la hora de tomar una decisión tan políticamente incorrecta.
¿Qué no habrán hecho estos sujetos para que un presidente tan progre tenga que tomar una medida tan comprometida?
¿Alguien adivina dónde va a recalar más de uno? En Francia una expulsión significa que en un periodo más bien corto. En España viene a suponer que en un periodo más corto todavía el expulsado debe quedar ubicado fuera del recinto del edificio oficial donde se le han notificado la expulsión. Y entonces el repudiado queda en un limbo legal que le permite permanecer en España sin ningún problema. Y en el caso que nos atañe, muy cerquita de la frontera para que los imanes mencionados puedan seguir controlando a sus seguidores y haciendo sus trapicheos.
Hay cosas que conviene aprender de nuestros vecinos del Norte.
Toda la basura del Mundo termina aterrizando en España. Hasta que esto sea un país de cabreados con palos en la mano.
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ResponderEliminarCréeme que yo a veces tengo malos sueños con estos tipos
ResponderEliminarEstos sujetos son una muestra viviente de hasta que punto puede llegar la imbecilidad humana.
ResponderEliminarRecalaran en el culo del culo que, hoy por hoy es Cataluña desde el punto de vista de afinidad islámica... Sólo espero que el día que la cosa reviente esteís lo suficientemente preparados cómo para dar el primer golpe. Quien golpea primero...
ResponderEliminarUn saludazo.