Tal vez uno de los más graves problemas que tiene este país es lo mal que se le da el elegir a la persona adecuada para el puesto adecuado. Y esto no es algo que venga de ahora, lo llevamos en los genes.
Tengo un amigo, católico a machamartillo, que ante las evoluciones del actual Papa sostiene que el Cónclave antes de comenzar pide la ayuda e inspiración del Espíritu Santo, pero eso no quiere decir que finalmente el Espíritu Santo venga, ayude e inspire.
Leyendo cualquier periódico es fácil comprobar como no se elige a menudo el más apto para cada cargo, incluyendo tal vez al mismo director del periódico que se trate. Por cierto, ¿para cuándo una directora de periódico de tirada nacional?
Y si seguimos tirando del ámbito religioso, vemos que Jesucristo eligió a la mayoría de sus primeros discípulos entre pescadores, predicó sobre una barca, ayudo a pescar, favoreció grandes pescas, calmó una tempestad, etc. en cambio marinos y pescadores eligen como patrona a la Virgen del Carmen, que se apareció en un monte. Tal vez no le perdonaran a Jesús que anduviera sobre las aguas ignorando la necesidad de una embarcación. El resentimiento es lo que tiene y hasta hoy en día llegan las consecuencias. Tal vez otra de ellas sea la elección de San Vicente Ferrer, pobre de solemnidad y dedicado a los pobres, como patrón de los estudiantes de Ciencias Económicas, y así salen luego como salen.
Menos mal que siempre nos quedará Italia, que allí también tienen mucho tino para elegir.
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