La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

lunes, 18 de noviembre de 2013

Hijo.


Siempre había oído que los sucesos económicos en EE.UU. repercutían en Europa poco tiempo después, para pasar después a Asia, África y resto del mundo. Vamos que se podía aplicar aquello de que “cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar”.

Pero ahora los centros de poder se han diversificado un poco, y nadie sabe muy bien que es el que corta la pana en la economía mundial, si es que hay alguien que lo haga.

Casi todos los analistas coincidían en que China era la que iba a asumir la cabeza del pelotón, pero como toda economía dirigida por el Estado no parece que sea muy ágil sorteando dificultades, decidiendo con rapidez o pensando en el bienestar de los ciudadanos antes que en el crecimiento del omnipresente partido.

Hace ya algunos años vieron sus gobernantes que si la población crecía sin medida, su demanda y consumo mermaría la producción destinada a la exportación. Así las cabezas pensantes decidieron implantar a sangre y fuego la norma del hijo único. Ninguna familia podía tener más de un hijo, con vistas a reducir al número de consumidores chinos. Eso sí, más tarde se suavizó la norma y se permitió que en el matrimonio donde los dos cónyuges fueran hijos únicos podían darse dos hijos. No sé qué pasaría si un/a viudo/a o divorciado/a con un hijo se casaba con alguien que no lo tenía.

Ahora se han dado cuenta de que la demanda china bajó por cuestiones demográficas, pero que también ha bajado la demanda europea y estadounidense por eso de la crisis. Además se encuentran con el problema de que es difícil reemplazar los trabajadores de sus empresas por falta de efectivos. Así que antes de tirar de esa peligrosa bolsa de trabajo que son los inmigrantes de otros países, han decidido que se va a suprimir la norma del hijo único.

Así que andan los expertos expectantes calculando si el cambio permitirá a la economía china sortear el problema así como así. Al fin y al cabo lograr unos cuantos millones de trabajadores chinos de repuesto lleva algunos años.

Ya veremos si por aquí son capaces de darse cuenta de que el vecino se va a rapar las barbas  y por tanto hacer algo para que los españolitos se van un poco más animados a ir reponiendo los recursos laborales que se van a ir agotando.

También sugiero a las autoridades chinas que ofrezcan a los emigrantes chinos que tienen dispersos por todo el mundo a que retornen a la madre patria y vayan dejando algún hueco a los nacionales de los países que los han acogido.

1 comentario:

  1. La baja tasa de natalidad en España es un problema real desde hace muchos años y las políticas que se han tomado para incentivarla (prácticamente nulas) no es que animen mucho, la verdad.

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