La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

domingo, 21 de diciembre de 2014

Un Muñoz Grandes.

Recientemente Joaquín Sabina como consecuencia de los años y el desgaste físico de los excesos, tuvo que suspender un concierto. Eso sí, con la habilidad de hacerlo cuando llegaban los bises, que antes hubiera supuesto tener que devolver las entradas. Y además el público eufórico porque creía estar viviendo un momento histórico.

Refiriéndose a lo que le había sucedido Sabina hablaba de que había tenido un Pastora Soler, la cantante que ha abandonado su actividad temporalmente por aquello del miedo escénico.

Muy socorrida esa especie de metonimia, ya que siempre vamos a encontrar dentro de todo lo que ha hecho y hace la especie humana algún ejemplo con el que comparar.

Por ejemplo se me ocurre que se podría hablar de hacer un Muñoz Grandes, que más que un desfallecimiento como los ejemplos anteriores se podría hablar de hacer algo que causa el desfallecimiento de los que rodean al que lo hace.

1954, la II Guerra Mundial de lo más reciente. El Capitán General y Ministro Muñoz Grandes es recibido en Washington. Para ir calentando motores cuando llega al aeropuerto les espeta a los periodistas y para pasmo del personal de la embajada española que "Aquí tienen ustedes a un criminal de guerra que no ha perdido su admiración por Alemania".

Y para que no quepan dudas, y dado que una imagen vale más que mil palabras, se entrevista con el presidente Eisenhower ostentando la Cruz de Caballero de la Cruz de Hierro con Hojas de Robre, que luce en el cuello y la medalla Militar Individual. Vamos, todo un Muñoz Grandes.
 
 

3 comentarios:

  1. El Muñoz Grandes tenía una jeta como la de un escuadrón de Caballería para ir a USA en plena guerra con las medallas de Adolf.

    Franquito lo temía y por eso lo trajo de Rusia y lo mandó de Alto Comisario a Marruecos.

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  2. El Sabina es un gran letrista, un mal cantante y un tipo bastante maleducado.

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  3. No debe de andar bien de salud: cuando lo ves de cerca parece tener la cara hinchada y mal aspecto. Además con la deuda de Hacienda (4 milloncetes) le debió de bajar la tensión hasta los talones. Einsenhower ya tenía su estrategia de guerra fría como preferencia suprema. Muñoz Grandes pasaba a ser un bufón útil.

    Felices Fiestas al Último de Filipinas y a su ya veterano blog Calle Soberanía. Un abrazo.

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