La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

domingo, 7 de enero de 2018

Encaje de bolillos.

Durante este pasado fin de semana, con el sábado como día de Reyes, en España se ha dado por terminada la Navidad. El lunes miles de estudiantes se incorporarán a sus clases y miles de trabajadores habrán finiquitado los últimos días libres pendientes del año recién acabado.

Y muchos españolitos tuvieron la feliz idea de emular a los Reyes Magos y ponerse en carretera, haciendo uso del GPS a falta de estrella que les guiara, pero cuando toda esta gente ha tenido que cruzar el sur de Segovia, se ha encontrado con una buena nevada, nevada que ha dejado impracticable las carreteras de peaje de la A6, que al llegar al punto donde pagan los que bajan al sur y fichan los que van al norte, y donde, ya con buen tiempo y en fin de semana, se montan unos buenos embotellamientos, y donde al juntarse la inclemencia meteorológica, ha llegado el caos absoluto. Tampoco es la primera vez. Pero los que optaron por no rascarse el bolsillo y utilizar la Nacional han tenido menos problemas, y al final las Autoridades han aconsejado ir por hay. 

Supongo que las empresas adjudicatarias de los peajes se estarán lamentando de que el pago se hace por el trayecto realizado y no por el tiempo de estancia en sus vías. Se hubieran forrado más aún.

Pero lo curioso ha sido el verdadero encaje de bolillos que han tenido que hacer las emisoras habitualmente críticas con el gallego que mora en La Moncloa: Tenían que criticar de la maneras más ácida y destructiva la gestión de las autoridades de la crisis, pero a la vez resaltar, loar y llevar a los altares como la UME, la Unidad Militar de Emergencias, creada por Zapatero, rescataba y auxiliaba a los atascados.

Me llamó la atención ver como una conductora se quejaba de que uno de los atrapados se había quedado sin insulina, y como se había comunicado a los militares tal circunstancia, y como nadie le había llevado al afectado dicho medicamento. La locutora prácticamente dejó caer que la culpa era de Rajoy por no haber llevado personalmente la insulina al conductor necesitado. 

2 comentarios:

  1. Destacas dos costumbres muy propias de la inculturs social general del país : La primera la de AMONTONARSE el gentío allí en donde más van a juntarse, por una razón que se me escapa pues lo lógico es que se planee ir por los caminos que se supongan menos conflictivos.

    Y la segunda la de que es mucho más facil echar la culpa de la falta de insulina o de catarro del niño de dos años a Rajoy por aquello de que es el jefe del Gobierno. Y hasta es posible que algunos le echen la culpa al rey.

    Yo creo que nuestra general mentalidad CAMPESINA sigue vigente en muchos de los que habitan en Madrid y en las grandes ciudades.

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  2. Es difícilmente explicable en esta sociedad en la que parece que lo privado se vende como la panacea y lo público es denostado hasta la saciedad, que las máquinas de Fomento mantuvieran limpia la carretera nacional y la empresa concesionaria de la AP-6, no fuera capaz (o no le diera la gana) de quitar la nieve de una vía en la que la gente paga por pasar y que se supone que ese dinero va a parar, en una parte, al mantenimiento de la misma, del que forman parte, entre otras cosas, las máquinas quitanieves.
    Por otro lado, me parece increíble que siga ocurriendo que los usuarios hagamos oídos sordos a los avisos que se nos dan sobre posibles complicaciones. Desde hacía una semana yo sabía, por lo que decían las páginas meteorológicas, que el sábado y el domingo se esperaban nevadas por debajo de los 600 metros, hasta el punto que se lo comenté a un conocido que iba a viajar por la autovía Madrid-Coruña en esas fechas. Si yo lo sabía, lo sabría otra gente, supongo. Bueno, pues da lo mismo, el personal se pone en carretera a pesar de estos avisos y después a echarle la culpa a otros.

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