La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

miércoles, 18 de abril de 2012

Realismo.


Hay veces en que no queda más remedio que ser realista. El gobierno argentino se la ha metido doblada al español y hasta el fondo. Tampoco la viuda de Kirchner es que haya tenido que hacer     sesudos cálculos y proyectos harto ambiciosos.  

Simplemente le ha bastado con leer en la prensa que el gobierno de Rajoy ha perdonado a una buena cantidad de defraudadores fiscales sus deudas con la hacienda que supuestamente es de todos.

Y de ahí a calcular que si no se ha atrevido con una serie de conciudadanos más o menos ubicados, ¿que va a poder hacer contra la expropiación y la más que previsible no indemnización, por un país soberano, situado a miles de kilómetros y hasta con un Océano de por medio?

Y tampoco cabe el consuelo de que otras empresas extranjeras se lo pensarán antes de afincarse en Argentina. Al contrario más de una ya estará diseñando su plan para ocupar el puesto de REPSOL.

Mi consejo a la quebrantada multinacional es que investigue a ver si hay algún yacimiento en el islote de Perejil.
                                                                                                        

2 comentarios:

  1. No creo que a nadie le haya cogido por sorpresa ni la expropiación ni la huida hacia adelante de la Kirchner.
    Hay quien olvida que son montoneros, o sea la extrema izquierda más radical de todo el cono sur.
    Marxistas leninistas trufados con el aroma de la incorrupta Evita Perón, que es como la momia de Lenin, pero con sabor a tango.

    Queda por ver si Rajoy toma medidas contundentes o todo se queda en un mohín de resignación y pataleta.

    Eso sí, que nadie espere una reacción thatcheriana:Mariano no es así...

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  2. Dan ganas de decirle que si no le apetece, que deje el cargo, así no se estresará.

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