Sospechoso esto del movimiento 15-M, una multitud de antisistemas acampados en la misma Puerta del Sol.
Al parecer reclaman una democracia real y estarán ahí hasta el día de las elecciones.
Ves las entrevistas que les hacen y sólo dan respuestas vagas y etéreas de lo que quieren, y eso que las preguntas son facilonas. No quiero ni pensar lo que podría suceder si las preguntas fueran acerca de cómo reduciría el paro o qué cambios introduciría en la constitución.
Tirando de aquello de la memoria histórica uno se acuerda de las caceroladas del 11 de marzo, y uno se teme qué sucederá cuando el 22 de mayo cuando previsiblemente el Partido Popular mantenga el gobierno de la comunidad autónoma, cuya sede está precisamente en la misma Puerta del Sol. Mucho me temo que el desmantelamiento del campamento será todo menos pacífico. Al menos la concentración no es frente al Ayuntamiento de Madrid, porque que la Cibeles se tuviera que comer este marrón ya sería mucho con todo lo que le toca ya.
Con lo fácil que hubiera sido instalar dicho campamento frente a la Moncloa, allí hay espacio de sobra, el aire es más puro y no fastidia a los peatones ni espanta el turismo.
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