¿Quién ha dicho que la historia no se repite? A menudo vemos como monumentos romanos han sido devastados, no por el tiempo o las guerras, sino por vecinos interesados, que viendo los ricos materiales de que estaban construidos, han aprovechado para ir, poco a poco, sacando piedra, mármoles, etc. Todo ello en beneficio de sus propias construcciones.
También ha sucedido por tierras de Castilla, donde muchos castillos, ya indefensos, se han visto saqueados para ir alimentando las casas del pueblo aledaño.
Y no es algo del tiempo pasado, ayer mismo visitando unos bunkers de la Guerra Civil, he podido comprobar cómo las paredes, supuestamente dispuestas para aguantar bombazos de buen calibre, se habían quedado en el grosor de una pared de piso moderno, merced todo ello de los constructores más cercano en la historia.
Eso si, no era difícil encontrar lugareños que se quejaban de los grafitis que "adornaban" lo que quedaba de los bunkers, y que vandalizaban todo lo que encontraban a su paso.
Pensaba que, teniendo en cuenta la finalidad de esas construcciones, tal vez los vándalos habían sido otros.
Seguramente tienes razón.
ResponderEliminarCierto...¡Ojalá la violencia contralos monumentos fuese el grafitero!
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Y en otro orden ¿Cómo está la cosa por la lejana Filipinas?
Lo del último de Filipinas va por la película Los últimos de Filipinas, que trata sobre los últimos soldados españoles destacados allí. Yo no he pisado por allá en la vida, y tal y como está la cosa, veo difícil que lo haga.
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