En los centros de trabajo, de vez en cuando, se da esa situación en que alguien se casa, se jubila o, simplemente, se va a otra empresa.
Entonces se comienza a recaudar dinero para hacer un regalo para ese trabajador, y cada compañero debe decidir si se suma a la colecta o no, lo cual, generalmente, se resume en aportar dinero y firmar en una tarjeta.
Los que deciden no sumarse, no aportan dinero, no firman y, lógicamente, no van a la invitación que hace el homenajeado, manteniéndose por tanto al margen en la medida de lo posible.
Algo parecido le ha sucedido a Pedro Sánchez, que en las fotos ha tenido que colocarse en un extremo, ha saludado a la menor cantidad posible de participantes en la cumbre de la OTAN y hacerse invisible en la mayor medida por no estar dispuesto a llegar al 5% de gasto militar.
Pero lo curioso ha sido cuando la italiana Meloni ha afirmado que, pese a todo ese paripé, Pedro Sánchez si se ha comprometido a ese 5%.
Supongo que, al final, nos enteraremos de los entresijos del asunto.
ResponderEliminarNo hay quien se aclare. Un beso
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