La Sentencia.

Hay que ir adelante, avanzar. Cuando te encuentres un traidor llámale traidor. Cuando te encuentres un ladrón, llámale ladrón. Cuando te encuentres un cobarde, llámale cobarde. Siempre adelante, hasta encontrar el sepulcro del hombre que nos va a rescatar en los luceros. Miguel de Unamuno.

miércoles, 9 de junio de 2021

Ánimos caldeados.

 

Hay que ver cómo ha ido cambiando el grado de susceptibilidad con los tiempos. En 1870 el canciller Bismarck logró enfurecer de tal manera a Francia, que le declaró la Guerra a Prusia. Para ello tan solo tuvo que hacer un resumen con su propia pluma del telegrama que el embajador francés le dirigió. Para ello hizo alguna que otra modificación, muy a su manera, y presentó el “resumen” a varios militares prusianos, el texto se difundió y acabó en una guerra entre ambos países, ya que caldeó lo suficiente los ánimos de la población tanto francesa como alemana.

Ahora, Estados Unidos ha estado espiando a la canciller alemana, además con la ayuda del servicio secreto danés, se supone que los alemanes tendrían que estar enfurecidos, pero por aquello del espíritu de concordia reinante, al parecer no va a pasar absolutamente nada. Y eso que ya ha habido antecedentes se sucesos similares. Y eso que se supone que cualquier noticia se propaga con mayor rapidez y difusión en la actualidad.

Nada es como era, y me pregunto cómo debería ser un suceso para poder caldear lo suficiente a la sociedad hoy.

1 comentario:

  1. Se ve que a pesar de lo inconsciente que es el ser humano, en algunas cosas hemos aprendido algo y es que una guerra se sabe como empieza, pero no como acaba, generalmente mal.

    ResponderEliminar