Sucede a menudo que las abundantes iniciativas que tiene un gobierno chocan entre ellas, echando una a la cuneta a otra.
Algo así puede suceder próximamente
en este país. Es afán de las autoridades que en los consejos de administración
de las grandes empresas, las mujeres tengan más representación, llegando lo
antes posible al 50%
Sin embargo, parece que todo está
quedando en unos buenos deseos, y que el género masculino sigue ostentando la
gran mayoría de los puestos de representación.
Pongamos que en un consejo de
ministros, uno de los muchos ministros dé un golpe en la mesa y aconseje que se
haga manu militari llegar a esa paridad.
Enterados los consejos de administración,
verían seriamente amenazados sus privilegios y se verían en la tesitura de que
la mitad de ellos tendrían que dejan sus sillones y ceder el puesto a mujeres.
Pero, hete aquí, que el mismo
gobierno les ha proporcionado la excusa perfecta. Bastaría un simple conciliábulo
para determinar que la mitad de sus componentes comparezcan ante el funcionario
de turno para declararse mujeres, o incluso no binarios. Sin necesidad de
operaciones ni informes médicos el predominio masculino sería quebrantado,
todos sus miembros mantendrían sus prebendas y ninguna mujer biológica habría
llegado a ese pequeño paraíso financiero.
Seguro que, viendo los beneficios
financieros, sus cónyuges estarían más que de acuerdo con tan astuto arreglo.
Y es que hecha la ley, hecha la
trama.
Más de uno estaría dispuesto a lo que fuere menester.
ResponderEliminarEn México se hizo eso ja, estoy casi seguro de haberlo leído. Todos los hombres fueron vestidos de rosa incluso jaja.... y bue...
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